Sábado, Junio 1, 2001

Cada año, en Houston, los casos de salmonella aumentan en junio.

Dado que los alimentos de origen animal pueden estar contaminados con salmonella, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Houston recomienda que las personas no coman huevos, aves o carne crudos o poco cocidos. Las aves y la carne, incluidas las hamburguesas, deben estar bien cocidas, no rosadas en el medio.

El departamento también aconseja a las personas que no consuman productos lácteos crudos o no pasteurizados. Las frutas y verduras frescas deben lavarse minuciosamente antes de consumirlas.

Según una revisión de cinco años realizada por la Oficina de Epidemiología del departamento, los casos de salmonella reportados aumentan mensualmente a entre 30 y 50 casos entre finales de junio y octubre y disminuyen abruptamente en noviembre.

La salmonella, una infección bacteriana que causa fiebre, diarrea y calambres abdominales, ocupó el quinto lugar entre las enfermedades infecciosas más comúnmente reportadas entre los años 1995 y 1999. Durante el período, los proveedores de atención médica informaron al departamento un total de 1,259 casos de salmonella, un promedio de 252 anualmente.

Los niños menores de cinco años representaron más del 44 por ciento de los casos de salmonella notificados, lo que los convierte en el segmento de la población más afectado. En términos de raza y origen étnico, los hispanos tuvieron el mayor número de casos con un 36 por ciento, seguidos por los blancos, un 28 por ciento; los negros, el 19 por ciento; desconocido 9 por ciento; y los asiáticos y otros, el 8 por ciento.

Aunque los asiáticos y otros grupos étnicos constituían una minoría de sólo el 8 por ciento de los casos, tenían tasas de infección significativamente más altas que todos los demás grupos individuales porque su población en riesgo era muy pequeña, menos del 4 por ciento de la población general de Houston.

La Salmonella suele durar de cuatro a siete días y la mayoría de las personas se recuperan sin tratamiento. Sin embargo, en algunas personas, la diarrea puede ser tan grave que sea necesaria la hospitalización. En estos pacientes, la infección puede propagarse desde los intestinos al torrente sanguíneo y luego a otras partes del cuerpo. Puede causar la muerte si no se trata rápidamente con antibióticos. Los ancianos, los bebés y las personas con sistemas inmunitarios deteriorados tienen más probabilidades de sufrir una enfermedad grave.

Las infecciones por Salmonella a menudo no requieren tratamiento a menos que el paciente se deshidrate gravemente o la infección se propague desde los intestinos. Las personas con diarrea grave pueden necesitar rehidratación, a menudo con líquidos por vía intravenosa. Por lo general, los antibióticos no son necesarios a menos que la infección se propague desde los intestinos.

Las personas con diarrea suelen recuperarse por completo, aunque pueden pasar varios meses antes de que sus hábitos intestinales sean completamente normales. Un pequeño número de personas infectadas con salmonella desarrollarán dolores en las articulaciones, irritación de los ojos y dolor al orinar. Esto se llama síndrome de Reiter.

La bacteria Salmonella generalmente se transmite a los humanos al comer alimentos contaminados con heces de animales. Los alimentos contaminados suelen tener un aspecto y un olor normales. Una cocción completa mata las bacterias.

También es posible que los manipuladores de alimentos infectados, que no se lavan las manos con jabón o lo hacen de forma inadecuada después de ir al baño, contaminen los alimentos.